jueves, 7 de noviembre de 2013
El pelado de Calle 13 contra los oligarcas – Crítica de Elysium.
Esta nota contiene spoilers.
Campos Elíseos es una de las denominaciones que recibe la sección paradisiaca del inframundo (el Hades); el lugar sagrado donde las "sombras" (almas inmortales) de los hombres virtuosos y guerreros heróicos que han de pasar la eternidad en una existencia dichosa y feliz, en medio de paisajes verdes y floridos En éste se disfrutaba de un infinito placer y sentimiento de paz. El odio, la codicia y demás pecados no podían perturbar este espacio sagrado del Hades, por contraposición al Tartaro (donde los condenados sufrían eternos tormentos).
En esta distopía, corre el año 2154, la tierra está superpoblada y en ruinas, como una favela gigante, mientras que los ricos han logrado exiliarse y viven cómodamente en una estación espacial en la órbita terrestre: Elysium. La metáfora es super obvia, pero no por eso es menos efectiva.
La secretaria de Defensa Jessica Delacourt (Jodie Foster) defiende a ultranza el estilo de vida que han logrado en Elysium aunque deba utilizar métodos poco convencionales ajenos al gobierno, como derribar naves de inmigrantes en el espacio en vez de deportarlos, o emplear mercenarios como agentes en la tierra.
Max DeCosta (Matt Damon), es un ex convicto que trabaja en una fábrica en las ruinas de L.A. y como muchos, creció soñando con escapar de la tierra dejando atrás la miseria y tener un futuro.
Mediante flashbacks recurrentes, nos van contando, la infancia de Max en el orfanato y su interés en Elysium.
Un pequeño incidente con los inflexibles robots policías lo lleva al precario y atestado hospital público donde se reencuentra con Frey (Alice Braga), su amiga de la infancia e interés amoroso, quien tiene una hija con Leucemia.
Cuestionada por el gobierno en la estación espacial, Jessica Delacourt decide tomar acciones drásticas y convence a John Carlyle (William Fichtner), el Jefe de Armadyne, la fábrica donde trabaja Max, de escribir un nuevo código para crear un golpe de estado y reiniciar Elysium bajo su poder, a cambio de un contrato indefinido. Carlyle almacena el programa en su propia mente para su custodia hasta que abandone la Tierra a Elysium.
Mientras tanto, un accidente laboral deja a Max expuesto a niveles peligrosos de radiación y es despedido. Con solo 5 días de vida por delante, el interés en Elysium se vuelve obsesión, necesita curarse y allá hay máquinas que lo curan todo, en cada casa tienen una.
Con su amigo Julio (Diego Luna), van a buscar a Spider (Wagner Moura), un contrabandista, hacker, de los que querés tener como amigo, que se compromete a ayudar a Max a infiltrarse en Elysium y utilizar un Med-Pod para curarse a sí mismo. A cambio, Max le ayuda a robar información de la mente de Carlyle que Spider puede aprovechar.
Como a esta altura Max es piltrafa humana, Spider le hace instalar un exoesqueleto rudimentario en una escena muchísimo menos gore de lo que uno esperaría.
Kruger (Sharlto Copley) el mercenario ninja hobo de Delacourt es convocado nuevamente junto a un par de colegas, y se enfrenta a Max y los hombres de Spider. El único que escapa con vida es Max con la información de Carlyle en su cabeza.
Max busca a Frey por ayuda, pero se niega a pasar de contrabando a su hija, Matilda, a Elysium para que se pueda curar. La niña le cuenta una fábula un tanto forzada que funciona como metáfora de Max y ella.
Con la información robada, Delacourt pone Los Angeles en cuarentena hasta que aparezca, los viajes quedan totalmente cancelados.
Spider revisa el programa en la cabeza de Max y le informa para que sirve, a pesar de eso Max decide ir a negociar con Kruger, el cual tiene secuestradas a Frey y su hija. Todos viajan a Elysium.
Kruger se pone un tanto cariñoso con Frey, lo que provoca una pelea donde le vuelan la mitad de la cara con una granada y la nave termina colisionando contra la base espacial y todos son capturados.
Kruger, que milagrosamente sigue vivo, es curado en una Med-Pod (genial escena la reconstrucción facial) y queda tan resentido que mata a Delacourt en una escena que me dejó sentimientos encontrados (quería que la vieja cobre pero que manera de desaprovechar un personaje principal inesperadamente).
Max escapa y se reúne con Spider, que llega con sus hombres para ayudarlo. Y se enfrentan a Kruger y sus hombres.
Spider le informa a Max que descargar la información de su cabeza será letal y el decide sacrificarse.
Luego de cargar el programa, Spider hace a los seres humanos de la Tierra ciudadanos de Elysium, permitiéndole a Frey utilizar uno de los Med-Pods para curar a Matilda, mientras que varias naves comienzan a llegar a la Tierra para localizar y ayudar a los habitantes.
Dirigida por Neill Blomkamp (director que ya se había ganado el respeto de todos con la económica y excelente District 9), Elysium es una muy buena película de ciencia ficción, que si bien cae en algunos clichés, eso no opaca el resultado final.
Nunca sale bien eso de hacer hablar español a un yanki (están atestados de latinos en USA y no consiguen uno que hable bien o los corrija), pero se aprecia que Matt Damon le haya puesto ganas en esas pocas escenas. Es una lástima que los personajes femeninos estén tan desaprovechados que podrían ser suprimidos tranquilamente. Lo más destacable es lo IGUAL a Matt Damon que es Maxwell Perry Cotton, el pibe que hace de Max joven en los Flashbacks “manofsteelezcos”.
Increíble el trabajo en los diseños y fondos, a cargo de Aaron Beck.
Realmente la pasé bien en el cine, siempre hace falta más ciencia ficción de calidad y Blomkamp viene cumpliendo.
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